Es un enfoque claramente “cognitivo emocional”, pues, aún asentándose en la orientación cognitivo-conductual, va más allá, ya que la teoría ACE (Arquitectura Cognitivo Emocional) remarca el universo interno personal, estando configurada por el peso de las Emociones, las Creencias Implícitas, los Moldes Mentales, las Situaciones Críticas, los NIS (Núcleos Implicativos Sensibles) y los Proyectos, interactuando todos estos componentes entre sí.
El motor de nuestra conducta son las necesidades, que impulsan a actuar en busca de una meta. El conjunto de metas y valores configuran nuestros proyectos. Cuando una meta se alcanza, produce satisfacción y cuando no, frustración e insatisfacción. Cuando las frustraciones se acumulan por situaciones críticas, se generan NIS, que se convierten en carburante de nuevas necesidades. Sin embargo, las emociones y los NIS dependen de la interpretación que den los moldes mentales que tengamos. Ésta es la importancia de la Moldemoterapia.
Eficacia de la Moldemoterapia
La eficacia de la MOLDEMOTERAPIA (“terapia basada en los moldes mentales y en las emociones”) radica en poder conocer cómo son los componentes de esa arquitectura cognitivo emocional para modificarlos, puesto que ellos son los responsables y co-responsables de nuestras teorías, emociones y comportamientos inadecuados.
- Su eficacia queda demostrada en diversos aspectos como pueden ser la reducción de la ansiedad, depresión, timidez, perfeccionismo, apatía, la mejora de la adaptación, el bienestar psicológico y el incremento en los resultados académicos o deportivos.
Inteligencia de las Emociones
Una investigación sobre la eficacia de la Moldemoterapia se evidencia al lograr que personas con alto nivel de ansiedad, situadas en zona extrema, redujeran ésta a puntuaciones similares a la propia de la media poblacional, después de sólo 5 sesiones ó 15 horas de intervención, manteniéndose e incluso mejorando los resultados un año y medio tras el tratamiento (Fernández-Martín, 2009; Hernández-Guanir y Fernández-Martín, 2010):
Mejorar_Ansiedad.pdf
Dos Maneras de Cambiar
Incluso, se ha logrado detectar dos modalidades de cambio, en función de las características personales.
- Una, representada por las personas más “emotivas”, que, con mayor eficiencia en el uso de la TBT, logran una “mejora potenciadora de sí mismas y estimuladora de sus ideales.
- Otra, la de las personas más “racionales”, que, siendo más deficientes en el manejo de la TBT, logran una “mejora de conexión con la realidad y reducción de su malestar” (Aciego, Hernández-Guanir, García-Hernández y Domínguez, 2008):
